Resumir la historia de Filipinas no es tarea fácil, pero aquí queremos ofrecerte algunas pinceladas del pasado y presente de este particular país asiático. Sin ser historiadores ni querer entrar en excesivo detalle (¡sería una locura!), hemos congregado los datos más importantes de la historia de Filipinas de una manera breve y sencilla. Al final de este artículo también te brindaremos algunos recursos que te servirán para ahondar en el tema o a ayudarte a ponerte en contexto de una manera más gráfica.

Es altamente probable que las playas de Filipinas hayan sido las culpables de que tu próximo viaje sea por estas tierras, pero, para que sea redondo, seguro que también quieres llevarte una visión global del país que vas a visitar.

Una idea interesante es acercarse a grandes ciudades como Cebú o Manila, donde podrás encontrar importantes vestigios del legado cultural y conocer de primera mano el presente de los millones de personas que viven en ellas más allá de los paraísos de cocoteros. Otra es pasarte por alguno de los festivales de Filipinas. Y, finalmente, un buen complemento de todo lo anterior es informarte sobre la historia de Filipinas más allá de quedarte con el dato aislado de su pasado colonial español.

¿Preparado? Sigue con nosotros y conoce un poco más sobre la historia de Filipinas.

Los primeros humanos en Filipinas

En 2018 se descubrieron herramientas de piedra en Rizal que demuestran que ya había humanos en Filipinas hace 709.000 años. De la misma manera, en 2007 se encontró en la cueva del Callao (cerca de Tuguegarao, Luzón) al Homo luzonensis u “Hombre del Callao”. Estos conforman los primeros restos humanos de Filipinas, de 67.000 años de antigüedad.

Ambos descubrimientos implican que ya existían humanos en el archipiélago, antes de la llegada de los llamados negritos (grupos étnicos que habitaban zonas aisladas del Sudeste Asiático y las Islas de Andamán también llamados atis, aetas o dumagats) y los austronesios. No se sabe con exactitud cuándo llegaron los primeros, aunque se estima que pudo ser alrededor del 5000 a.C. Los primeros austronesios pudieron hacerlo sobre el 2200 a.C. desde Taiwán y se instalaron en Batanes y la zona norte de la isla de Luzón.

Se cree que sobre el año 1000 a.C. los habitantes de Filipinas se dividirían en 4 categorías:

  • Grupos tribales como los aetas, los hanunuo, los ingolotes y los mangyan, cazadores-recolectores que vivían en los bosques.
  • Sociedades de guerreros itinerantes como los isneg o los kalinga.
  • La plutocracia de los ifugao en Cordillera.
  • Los pueblos que vivían próximos a los ríos y costas que basaban su economía en el comercio marítimo.

Entre el 300 y el 700 a.C. se intensificó el comercio con el llamado “mundo indio”, concretamente con el archipiélago malayo (Indonesia, Singapur, Brunéi, Malasia, Timor Oriental y gran parte de Papúa Nueva Guinea) y con Asia Oriental, de donde llegaron las influencias del budismo y el hinduismo. Estas travesías se hacían en los llamados balangays (velero), de los cuales surge la palabra barangay, barrios/aldeas en los que vivían los filipinos.

Restos en cuevas como la de Kalanay (Masbate) o la de Tabon (Palawan) confirman que la cultura Sa Huỳnh, que se originó en el sur y centro de Vietnam, también formó parte de la historia de Filipinas.

tribus aetas filipinas

Aetas del monte Pinatubo

El período precolonial

Sobre el año 1000 d.C. no encontrarías ningún estado unificado si llegases a Filipinas. Lo que verías son muchos estados semi-autónomos bajo el poder de talasocracias gobernadas por datus, wangs, rajás, sultanes o lakans o sociedades que vivían en las montañas reinadas por plutócratas o élites económicas. Tales son el Reino de Maynila, el Reino de Taytay, el Reino de Tondo, el Rajanato de Cebú o los sultanatos de Maguindanao y Lanao.

Entre los siglos XIV y XVI se da lo que se conoce como el período barángico en la historia de Filipinas. Es decir, la organización sociopolítica del país en estados barangay, que tienen naturaleza nómada, pero que se trasforman en asentamientos o flotas según los recursos (principalmente madera). Entre ellos hacían alianzas o combatían.

Los primeros barangays eran pequeñas comunidades de 30 a 100 familias, con una población entre 100 y 500 personas comandadas por un jefe. Luego se fueron haciendo más grandes, sobre todo las ubicadas junto al mar. Las más exitosas eran las cercanas a un delta de un río.

Cabe notar que durante estos siglos siguieron viniendo muchos inmigrantes y comerciantes de Sumatra, Java, la península malaya, Japón y China, que se establecieron en Filipinas. Esto, por ejemplo, derivó en la influencia del sánscrito en las lenguas autóctonas (échale un vistazo al baybayin y verás de lo que te hablamos), el florecimiento del islam, la enseñanza de fabricar ciertas armas u herramientas y el uso de materiales como la porcelana, el plomo, la plata o el estaño.

La llegada del catolicismo

El 17 de marzo de 1521 llega una expedición española comandada por el portugués Fernando de Magallanes. Lo hace en la isla de Homonhon, al sudeste de Samar. El explorador empezó a establecer relaciones con algunos líderes locales como el rajá Humabon, al que posteriormente apoyó en la Batalla de Mactán contra Lapu-Lapu, el caudillo o datu de la isla. Magallanes falleció durante la contienda.

Aun así, la cosa no se quedó así. En las décadas siguientes de la historia de Filipinas, varias expediciones con bandera española llegaron a las islas. Como curiosidad, fue en esta época cuando fueron bautizadas como Islas Filipinas en honor a Felipe II.

La expedición más importante fue la de 1565 cuando llegó Miguel López de Legazpi desde México con 5 barcos, 400 hombres y 5 monjes agustinos con estrictas órdenes de colonizar y catolizar. Fue él quien mandó erigir el Fuerte de San Pedro, que aún puedes ver en Cebú.

A partir de esas fechas se empezaron a formar asentamientos españoles, intentar unificar un archipiélago fragmentado en decenas de estados y, por supuesto, introducir el catolicismo en un territorio donde se había extendido el islam en los últimos siglos. Fueron isla por isla hasta que llegaron en 1571 a Maynila, donde combatieron al rajá Sulayman para “fundarManila y convertirla en la capital de las Islas Filipinas. Se comenzó la construcción de Intramuros, el centro original de gobierno, educación y comercio y donde vivirían gran parte de las clases acomodadas en los siguientes siglos.

La nueva colonia era parte del Virreinato de Nueva España, por lo que se administraron desde Ciudad de México hasta 1821, cuando México consiguió la independencia. Aunque había un gobernador, la realidad es que fuera de Manila los frailes eran quienes tenían mayor poder. Durante la friarocracia, los frailes intentaron construir pueblos más grandes y alzaron imponentes iglesias de piedra. Algunos de estos vestigios de la historia de Filipinas todavía pueden visitarse como la de San Agustín en Intramuros o la de Paoay, en Ilocos Norte.

iglesia de san agustín historia de filipinas

Iglesia de San Agustín, Intramuros

La consolidación del poder español

A lo largo del siglo XVII soldados de España, México y Perú, principalmente, llegaron con el objetivo de defender los asentamientos que ya se habían establecido a lo largo del archipiélago. De la interacción con los primeros habitantes de las islas surgieron los primeros mestizos y lenguas como el chabacano, de la que te hablamos en Idiomas de Filipinas.

En esta época también se fundaron colegios y universidades como el Colegio de Manila (después llamada Universidad de San Ignacio) o la Universidad de Santo Tomás, donde, además de religión, se impartían clases de física, química o matemáticas. En las comunidades más pequeñas, los misioneros eran los encargados de enseñar español y técnicas de cultivo para las semillas que se trajeron de Latinoamérica como el maíz, el chocolate o la piña. También se construyeron escuelas y hospitales.

⛵ Esta fue, por supuesto, la era dorada del Galeón de Manila. La ruta unía Manila con los puertos de Nueva España en América, especialmente Acapulco, y supuso un impulso económico para la capital, que llegó a ser conocida como la “Perla de Oriente” por su belleza.

Sin embargo, durante el siglo XVIII, los conflictos con los musulmanes al sur, la larga guerra con los holandeses al oeste y los ataques de piratas japoneses que venían del norte, junto con lo poco rentable que era la colonia, debilitaron mucho el poder de los españoles y facilitaron que entre 1762 y 1764 Manila fuese invadida nuevamente por los británicos.

En 1821, con la independencia de México, Filipinas pasó a ser parte del Reino de España. De hecho, la Constitución de 1870 califica al archipiélago como una “provincia de Ultramar”. En el siglo XIX se invirtió considerablemente en infraestructura y educación. En 1863, Isabel II decreta el establecimiento del sistema de educación pública. Mientras que en 1851, se creó el Banco Español- Filipino de Isabel II para administrar el boom económico que supuso la explotación de cultivos como los del abacá o el coco de una manera más ordenada.

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Plaza Moraga (Manila) en 1901. Fuente: Wikimedia Commons

La Revolución Filipina

La independencia de España de varios países de América Latina hizo que creciera la desconfianza en los oficiales del ejército latinos y criollos y que fuesen sustituidos por los conocidos como peninsulares, es decir, los nacidos en España. Este movimiento racista supuso el descontento de gran parte del ejército, que empezó a dar signo de ello en varias revueltas.

Por otro lado, el sentimiento de independencia de los filipinos establecidos en América y Europa empezó a crecer significativamente a finales del siglo XIX. El motín de Cavite, en 1872, fue el impulso final, pues aprovechando la sublevación fallida de unos 200 soldados y trabajadores, el gobierno decretó la muerte por garrote de varios líderes filipinos y 3 famosos sacerdotes, condenados por sedición. Este hecho despertó aún más la ira y el resentimiento contra el gobierno colonial.

Mientras tanto, en Europa, los ilustrados (la clase “educada” de los filipinos) empiezan a organizarse en movimientos de protesta. Entre ellos, surge ya en tierras filipinas La Liga Filipina. Esta era una asociación de corte pacífico que buscaba la defensa de los derechos de los filipinos dentro del gobierno de España aunque sin hablar en ningún momento de manera clara sobre la independencia.

Aquí entra en juego un pilar fundamental de la historia de Filipinas: José Rizal. Ilustrado, médico, poeta, novelista, pintor, escultor y lingüista, fue uno de los fundadores de la Liga Filipina y hoy es considerado héroe nacional. Aunque sus objetivos no pasaban por saltarse el marco de la legalidad, en 1892 es considerado sospechoso de rebelión y exiliado a Dapitan, Mindanao.

El mismo día de dicha detención, Andrés Bonifacio funda el Katipunan o KKK. Esta sociedad secreta, de la cual no era parte José Rizal, sí surge con la intención de conseguir la independencia del poder español. El 6 de agosto de 1896, cuando contaba con unos 30.000 miembros, es descubierta por las autoridades españolas, dando inicio a lo que se conoce como la Revolución Filipina.

El 6 de octubre de 1896, Rizal es encarcelado en Barcelona cuando iba de camino a Cuba para atender a las víctimas de la fiebre amarilla en un intento de demostrar que estaba de lado del gobierno colonial. Se le acusa de ser parte del KKK y de sedición, rebelión y conspiración, así que es enviado inmediatamente a Manila. Sus últimos días los pasó en una celda en Fort Santiago, Intramuros, donde escribe su famoso poema “Mi último adiós” hasta que el 30 de diciembre del mismo año es fusilado en el lugar que hoy es el parque Rizal. Ahora puedes visitar el rincón exacto en el que ocurrió, encontrarás una representación del asesinato.

fusilamiento de José Rizal en el Parque Rizal

Después de varios meses de revueltas, los katipuneros y el gobierno español firmaron un acuerdo de paz y el General Emilio Aguinaldo, líder de la facción Magdalo del KKK, accede a exiliarse a Hong Kong en diciembre de 1897. Sin embargo, ninguna de las partes cumplió el pacto y la tensión siguió creciendo mientras las tensiones de Estados Unidos y España aumentan hasta comenzar la Guerra Hispano-Estadounidense, que se trasladó a tierras filipinas, donde los americanos ayudaron a los rebeldes a hacerse fuertes.

España queda derrotada por las fuerzas estadounidenses en la Batalla de la Bahía de Manila de 1898. Unos meses después, Aguinaldo vuelve a Filipinas ayudado por EE.UU., declara la independencia del archipiélago y la Primera República Filipina. El Tratado de París, firmado el 10 de diciembre de 1898, pone fin a la Guerra Hispano-Estadounidense y España vende Filipinas, Guam y Puerto Rico a Estados Unidos por la irrisoria cantidad de 20 millones de dólares. Esto supone el final de más de 300 años de la presencia española en Filipinas.

⭐ Los únicos que no parecieron enterarse de las noticias de la retirada fueron los miembros del destacamento de Baler, al noreste de Manila. Los llamados «Últimos de Filipinas« permanecieron confinados en la Iglesia de San Luis de Tolosa hasta que se rinden el 2 de junio de 1899.

los últimos de filipinas en su llegada a Barcelona

Los Últimos de Filipinas al llegar a Barcelona. Fuente: Wikipedia

La Guerra Filipino-Estadounidense

Si bien el gobierno de Estados Unidos había remarcado a los katipuneros que su interés era derrotar a los españoles y ayudarles a conseguir su independencia, lo cierto es que no tardaron mucho en mostrar otras intenciones. El presidente estadounidense William J McKinley, haciendo caso a los imperialistas, declaró que los filipinos “no estaban preparados para el autogobierno” y que tenían que “civilizarlos”.

Aguinaldo, al darse cuenta de que las tropas estadounidenses estaban para ocupar el país, situó la capital en Malolos (fuera de Manila) y declaró la guerra a comienzos de 1899. Por desgracia, el número de tropas filipinas y su escaso equipamiento hizo que murieran unos 20.000 soldados. Casi 200.000 civiles lo hicieron mayoritariamente por una epidemia de cólera derivada de la escasez de la guerra.

El presidente filipino fue capturado en marzo de 1901, pero la guerra continuó hasta el 4 de julio de 1902, cuando Estados Unidos declaró su victoria. Aun así, ya hacía un tiempo que el gobierno estadounidense se había puesto las pilas para organizar el sistema político a su gusto.

La ocupación estadounidense

Unos años después de haber disuelto el gobierno militar, Estados Unidos, aunque con desconfianza, permitió un sistema bicameral. La Philippine Assembly era la cámara baja elegida por el pueblo, mientras que la Philippine Commission, cuyos miembros eran elegidos a dedo, era la cámara alta. Además, prometieron de forma pública la eventual independencia de los filipinos.

En los primeros años del siglo XX se establecieron importantes reformas, sobre todo en lo concerniente a la educación. Se implantó un sistema de escuelas públicas y cientos de profesores de EE.UU. llegaron al país para enseñar aritmética, leer, escribir y, por supuesto, inglés. Se estima que en 35 años de ocupación americana, el 27% de la población podía hablar este idioma y el 50% dejaron de ser analfabetos.

En 1935 se establece la Commonwealth de Filipinas o Mancomunidad Filipina junto con una nueva constitución y un presidente electo por sus ciudadanos, Manuel L. Quezon, líder del Partido Nacionalista. Esta duraría hasta 1946, cuando Filipinas pasaría a ser un país independiente.

Manuel Quezon historia de filipinas

Manuel L. Quezón en el centro y los representantes de la Philippine Independence Mission. Fuente: Library of Congress

La Segunda Guerra Mundial en la historia de Filipinas

Por desgracia, lo que parecía que iba a ser un período tranquilo, resultó ser todo lo contrario con el comienzo de la II Guerra Mundial. Los japoneses atacaron la base militar de Clark en 1941 y las fuerzas estadounidenses, comandadas por el General MacArthur, tuvieron que rendirse no sin antes declarar en su famoso discurso que “volvería”.

La ocupación japonesa finaliza con el retorno de MacArthur por la isla de Leyte, donde se desarrolló la Batalla del Golfo de Leyte, la contienda naval más grande de la historia del mundo moderno. Sin embargo, el movimiento decisivo se daría durante la Batalla de Manila, que duró casi un mes y que no solo causó casi la destrucción total de la Perla de Oriente sino la muerte de unos 150.000 civiles. Manila se convirtió, junto a Varsovia e Hiroshima, en una de las ciudades más devastadas durante la guerra.

Más de un millón de filipinos murieron durante la II Guerra Mundial. La pobreza era rampante.

escultura soldado filipino y estadounidense

Pacific War Memorial en la isla de Corregidor

La independencia de Filipinas

Tras la muerte del presidente Quezon en 1944 y una sucesión rápida por Sergio Osmeña, se celebraron elecciones en 1946 y Manuel Roxas fue declarado el primer presidente de la ya independiente República de Filipinas. Sin embargo, la destrucción por la guerra provocó que, de facto, siguiese siendo económicamente dependiente de EE.UU.

Varios presidentes lucharon por la recuperación del país, con mayor o menor éxito, pero también otros fueron acusados por corrupción. Cosa que, como verás, se ha ido repitiendo a lo largo de la historia de Filipinas.

El gobierno de Marcos

En 1965, Ferdinand Marcos, del Partido Nacionalista, fue elegido 4º presidente de Filipinas tras el fin de la II Guerra Mundial. Bajo el lema “Esta nación puede ser fabulosa de nuevo”, el comienzo de su mandato se centró en hacer algunas reformas que trajeran el estado económico del país antes de la guerra. Fue el primer presidente en ser reelegido por 2ª vez en 1969.

Sin embargo, la extendidísima pobreza, la creciente inflación, el aumento del crimen, la rampante corrupción, los crecientes problemas con el Frente Moro de Liberación Islámica (MNLF) en Mindanao y la creación del Nuevo Ejército del Pueblo por el Partido Comunista levantaron una ola de protestas en Manila.

? Contra esto, Marcos declaró la ley marcial en 1972, lo cual le confirió la potestad para gobernar a su gusto y cerrar el congreso. Impuso el toque de queda, limitó la libertad de prensa, prohibió los viajes internacionales y ordenó arrestar a 50.000 líderes de la oposición y activistas militantes como el senador Benigno Aquino Jr.

Además, entró en vigor una nueva constitución en 1973 que, por supuesto, permitía continuar su legislatura más allá de los 2 mandatos. ¿La razón? Según Marcos, el objetivo de la ley marcial era crear una “nueva sociedad”, pero la realidad es que durante su dictadura la pobreza siguió creciendo mientras su esposa Imelda (una adicta a los zapatos caros) y él robaban fondos del estado desde el Palacio de Malacañang.

Según Amnistía Internacional y otras organizaciones de vigilancia de los derechos humanos, durante su mandato se cometieron 3.257 asesinatos extrajudiciales (de los cuales más de 2.500 se mostraban en público para asegurar el miedo de la gente), 35.000 torturas documentadas, 77 “desaparecidos” y 70.000 encarcelaciones.

El presidente levantó la ley marcial en 1981, pero la corrupción y el nepotismo continuaron sin que hubiera mucha preocupación por ocultarlo. La economía siguió viéndose afectada y en 1983 cayó la gota que colmó el vaso: el asesinato de Benigno Aquino Jr. en el aeropuerto de Manila tras volver de un largo exilio.

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Ferdinand Marcos y su familia en 1969. Fuente: Philippine Presidential Museum and Library

La Revolución del Poder Popular

El descontento social y la presión de Estados Unidos culminaron en unas elecciones presidenciales en febrero de 1986. Aunque en la oposición se encontraba la viuda de Benigno Aquino, Corazon Aquino, los resultados dieron el poder de nuevo a Marcos. Observadores locales e internacionales reclamaron el fraude electoral y se desataron una ristra de revueltas civiles pacíficas conocidas como la Revolución del Poder del Pueblo.

Dos millones de civiles y varios grupos políticos, militares y religiosos se lanzaron a las calles no armados para protestar contra la violencia del régimen y el fraude electoral. Con un ambiente festivo, la mayor parte del recorrido se realizó por la Avenida Epifanio de los Santos en Manila, también llamada EDSA, por lo que también es conocida como la Revolución de EDSA.

Marcos, tras la recomendación de Estados Unidos, se vio obligado al exilio en Hawái (llevándose, por supuesto, varios millones de dólares) y “Cory” Aquino fue declarada la 11ª presidenta de la historia de Filipinas.

Durante su mandato se reestablecieron las instituciones democráticas, se protegieron los derechos civiles y se redactó una nueva constitución, sin embargo, Cory no lo tuvo fácil. Se enfrentó hasta 6 golpes de estado militares, la insurrección comunista y al revés en la economía provocado por desastres naturales como la erupción de uno de los volcanes de Filipinas, el Pinatubo, en 1991.

Por otro lado, el senado filipino rechazó un tratado para extender el uso de las bases militares estadounidenses en el archipiélago. En diciembre de 1992 acabaron los casi 100 años de presencia militar de EE.UU. en la historia de Filipinas.

La historia de Filipinas en el siglo XXI

Tras el gobierno de Fidel V. Ramos, en el que hubo un notable desarrollo económico y un poco de estabilidad política, en 1998 entró al poder el actor de cine Joseph Estrada. Poco duraron sus promesas de ayudar a los más pobres porque a comienzos de 2001 fue destituido por el Tribunal Supremo por escándalos de sobornos y corrupción. Miles de filipinos se lanzaron de nuevo a las calles hartos de presidentes ladrones.

Fue sustituido por Gloria Macapagal-Arroyo, vicepresidenta de Estrada e hija del anterior presidente Diosdao Macapagal. Reelegida en 2004, su mandato finalizó en 2010 sin estar exenta de escándalos de corrupción y ser salpicado por la durísima Matanza de Maguindánao, en la que 58 personas fueron tiroteadas por el partido opuesto cuando iban de camino a presentar un certificado de candidatura en unas elecciones en Maguindánao, Mindanao.

El hijo de Cory y Benigno Aquino, Benigno “Nonoy” Aquino III, ganó las elecciones con un apabullante 42% sobre el resto de candidatos, entre ellos el antiguo presidente Estrada.

Durante el gobierno de Nonoy (2010-2016) la economía filipina creció considerablemente, por encima del 7% y convirtiéndose en una de las más potentes de Asia. Se intentó alcanzar la paz con los grupos más radicales de Mindanao y el archipiélago de Sulu firmando el Framework Agreement on the Bangsamoro, una región autónoma. El supertifón Yolanda arrasó la región de Bisayas y se criticó muchísimo la gestión de los paquetes de ayuda a la población. También se agravaron los problemas con China por cuestiones de soberanía en el mar del Sur de China.

Salpicado por algunos escándalos políticos, problemas con el Frente Moro de Liberación Islámica (MILF) de nuevo, la falta de progresos sociales y en infraestructuras, Aquino fue perdiendo popularidad. Rodrigo “Rody” Duterte, alcalde de la ciudad de Davao (Mindanao), con sus 71 años arrasó en las elecciones de 2016. Sus promesas de acabar con la corrupción, el crimen, mejorar las relaciones con China y el “legado” que había dejado en Davao convencieron a una población ansiosa de cambios.

Rodrigo Duterte jurando su cargo

Rodrigo Duterte jura cargo como presidente el 30 de junio de 2016. Fuente: Presidential Communications Operations Office

Filipinas en la actualidad

Muchos analistas y académicos califican a Duterte como populista, nacionalista e, incluso, fascista. La realidad es que antes de ser presidente, fue conocido como “El Castigador”. Sus 22 años como alcalde de Davao se caracterizaron por su política de tolerancia cero con la delincuencia. Apoyó expresamente las ejecuciones extrajudiciales de criminales y consumidores de drogas. Los grupos de derechos humanos documentaron más de 1.400 homicidios por escuadrones de la muerte entre 1998 y 2016.

Ya en su campaña política, Duterte prometió que mataría hasta 100.000 criminales si salía elegido presidente. No tardó en cumplir su amenaza porque en los 3 primeros meses de su mandato, la “guerra contra las drogas” ya contaba con 3.000 muertos. En octubre de 2020 se contaban más de 5.800, aunque los grupos de derechos humanos elevan la cifra a más de 30.000. Instituciones como la Corte Penal Internacional tienen acciones pendientes contra él por crímenes de lesa humanidad.

Por otro lado, aunque hubo algo de acercamiento con el MILF y el MNLF, los problemas aún persisten en este sentido en el sur. Lo mismo ocurre con la guerrilla comunista filipina, que, aunque ahora cuenta con menos de 4.000 efectivos, sigue siendo la más antigua y letal de Asia.

A pesar de las polémicas, la crisis económica, las grandes desigualdades económicas que siguen existiendo de la población, el alejamiento de Estados Unidos y el azote de la COVID-19 en Filipinas y su mala gestión, otras medidas como hacer las universidades más accesibles, la legalización del “matrimonio igualitario” o poner al alcance de las mujeres más desfavorecidas la píldora anticonceptiva le dieron siempre una aceptación de alrededor del 91% del pueblo.

Los analistas siempre señalaron que esto se debía al populismo de las medidas, sobre todo la concesión de algunas ayudas a la clase más desfavorecida para que olviden de otros movimientos políticos menos aceptables. El componente personalista de la política en Filipinas es mucho más importante que el ideológico.

¿Te acuerdas de Marcos? Aunque cueste creerlo tras la fama de su padre, pues fue su hijo, Ferdinand Marcos Jr. (conocido como «Bongbong»), quien ganó las elecciones de mayo de 2022. La vicepresidenta (¡sorpresa!) fue la hija de Duterte, Sara Duterte. ¿Qué trae el futuro? Tendremos que esperar un poco para ver cómo se desarrolla este nuevo mandato.

Hitos de la historia filipina

65.000 a.C.: Se cree que los primeros humanos llegaron a Filipinas en balsa. Los restos del Hombre de Callao datan de esa época, aunque se han encontrado vestigios de actividad humana de unos 709.000 años de antigüedad.

100-200 a.C.: Primeros intercambios comerciales con China.

100 a.C.-1000 d.C.: Muchos inmigrantes y comerciantes de Sumatra, la península de Malasia y la isla de Java se asientan en Filipinas.

1200-1600: Florecimiento del comercio con China y asentamientos chinos. También se realizaban intercambios comerciales con India, Japón, Vietnam, Camboya y Tailandia. El país estaba dividido en varios sultanatos y rajanatos.

1521: Fernando de Magallanes llega a la isla de Homonhon (Samar) y clama que es propiedad de España. Muere en la Batalla de Mactán a manos de Lapu-Lapu, jefe tribal de la isla de Mactán.

1565: Legazpi llega en una expedición desde México y logra incluir a Filipinas dentro del Virreinato de Nueva España.

1571: Tras batallar con el rajá de la ciudad, Legazpi funda lo que se conoce hoy como Manila y comienza la construcción de Intramuros.

1565-1815: La época dorada del Galeón de Manila, la ruta entre Manila y los puertos de Nueva España (Acapulco principalmente). Los intercambios comerciales entre Asia, Europa y América convirtieron a Manila en una de las ciudades más ricas y bonitas de la zona, pasando a ser conocida como la Perla de Oriente.

1762: Reino Unido ocupa Manila durante 2 años. Comienza a verse el rechazo a España por el pueblo.

1821: Se declara la independencia de México y Filipinas pasa a ser administrada por Madrid.

Siglo XIX: Se fundan muchas ciudades, se invierte en infraestructuras y en escuelas públicas. Hay un boom económico debido a la innovación en la agricultura y la industria del tabaco y el azúcar crea una clase de mestizos ricos. Los ilustrados, nativos de la clase media filipina que estudiaron principalmente fuera, empiezan a sembrar las ideas de la independencia.

1872: El motín de Cavite supone la prueba definitiva del surgimiento del nacionalismo filipino. Acabó con la muerte de Padre José Burgos y dos sacerdotes más condenados por traición y sedición.

1892: José Rizal regresa a Filipinas y forma La Liga Filipina, un movimiento cívico para pedir reformas sociales en el marco de la legalidad de la época. Sin embargo, es deportado a Mindanao.

1896: Comienza la Revolución filipina y José Rizal es injustamente acusado y ejecutado. Se convierte en un héroe de la historia de Filipinas y aumenta el sentimiento nacionalista frente al gobierno español.

1898: Se firma el Tratado de París, que pone fin a la guerra hispano-americana y cede Filipinas a Estados Unidos.

1901: Los estadounidenses capturan al líder revolucionario Emilio Aguinaldo dentro del marco de la Guerra Filipino-Americana.

1935: Se celebran las primeras elecciones nacionales y gana Manuel L. Quezón. Se declara la Commonwealth de Filipinas, una mancomunidad con Estados Unidos.

1942: 75.000 soldados estadounidenses y filipinos son obligados a rendirse frente a Japón y retirarse a Batán.

1946: Filipinas consigue la independencia y Manuel Roxas se convierte en el primer presidente de la república independiente.

1965: Ferdinand Marcos es el primer presidente en ser reelegido para un segundo mandato pero la economía se ralentiza y la corrupción campa a sus anchas, avivando el resentimiento del pueblo.

1972: Marcos declara la ley marcial y encarcela a periodistas y líderes de la oposición, entre ellos Benigno “Ninoy Aquino Jr.”, que posteriormente se exilia en Estados Unidos.

1983: A su vuelta de Estados Unidos, Aquino es asesinado en el aeropuerto de Manila. Comienzan las protestas frente a Marcos.

1986: La Revolución de EDSA o Revolución del Poder del Pueblo fue una revuelta pacífica que condujo a que Marcos dejara el gobierno. La viuda de Ninoy Aquino, Corazón Aquino, se convierte en presidenta hasta 1992.

1991: El volcán Pinatubo entra en erupción y la base de Clark se convierte en inutilizable. El senado no renueva la extensión de las bases militares en el país y finaliza la presencia militar estadounidense.

2013: El tifón Yolanda azota a la región de Bisayas, que queda casi destruida.

2016: Rodrigo Duterte es elegido presidente de Filipinas. Su gobierno no estuvo exento de polémicas, siendo su “guerra contra las drogas”, que ha dio como resultado miles de ejecuciones extrajudiciales, lo más criticado por grupos de defensa de los derechos humanos y organismos internacionales como la ONU.

2022: Ferdinand Marcos Jr. ganó las elecciones de mayo de 2022.

Heritage Monument of Cebu historia de filipinas

Heritage Monument of Cebu en el centro histórico de Cebú

Lugares de interés para visitar y conocer la historia de Filipinas de cerca

A lo largo de este artículo ya te hemos ido citando algunos sitios en los que puedes acercarte un poco más a la historia de Filipinas. Sin embargo, aquí te resumimos los que nos parecen más interesantes por si quieres incluirlos en tu viaje:

  • Manila: si bien la capital de Filipinas no es una ciudad bonita (sobre todo al leer los destrozos de la II Guerra Mundial), te aconsejamos que te acerques a Intramuros, donde se ubican, entre otros edificios históricos, el Fuerte de Santiago, la Catedral de Manila o la Iglesia de San Agustín. Puedes leer más en nuestros artículos Qué hacer en Manila y Qué ver en Intramuros.
  • Cebú: en la capital de Bisayas también vas a poder aprender sobre la historia de Filipinas en lugares como el Fuerte de San Pedro y las casas ancestrales cercanas. Te contamos todo en Qué hacer en Cebú.
  • Vigan: esta es la ciudad colonial mejor conservada del país. Si quieres degustar ese aire español que todavía se respira en el archipiélago, no lo dudes.
  • Iloilo: esta ciudad de la isla de Panay también jugó un papel esencial en tiempos españoles. En ella vas a encontrar el Museo Iloilo y algunas iglesias interesantes. Además, a 40 kilómetros se ubica la Migao Church, construida entre 1787 y 1797 y declarada Patrimonio de la Humanidad.
  • La zona de Cordillera: para adentrarte dentro de los grupos tribales que poblaban el archipiélago antes de la llegada de Magallanes, te aconsejamos que hagas una escapada a Banaue, Batad, Sagada y tierra Kalinga.
  • Corregidor Island: esta es una de las excursiones desde Manila que puedes hacer. La base de defensa de la Bahía de Manila, en ella encontrarás vestigios de la II Guerra Mundial.

Algunos recursos para aprender más sobre la historia de Filipinas

Como ves, al final este resumen de la historia de Filipinas no ha sido tan corto como esperábamos porque, siendo sinceros, es un tema que nos apasiona. Si, aun así, quieres seguir ahondando en el tema, hemos querido dejarte algunos recursos literarios y audiovisuales que te pueden interesar:

Textos sobre la historia de Filipinas

Novelas inspiradas en Filipinas

Documentales y películas sobre Filipinas

Podcasts relacionados con la historia de Filipinas

Perfiles en redes sociales relacionados con Filipinas


Esperamos haberte inspirado con este resumen sobre la historia de Filipinas. Si tienes cualquier sugerencia o duda, ¡encantados de la respondemos en comentarios!